En el siempre intrigante escenario del mercado invernal de fichajes, las especulaciones y los rumores son moneda corriente, alimentando la expectativa de los aficionados. Este martes, una noticia ha capturado la atención de los seguidores del fútbol, especialmente en España, donde se asegura que Erling Haaland, la sensación noruega, cambiará el cielo inglés por el azulgrana catalán a mediados de este año.

La noticia proviene de François Gallardo, un periodista que, en una intervención televisiva, afirmó con seguridad que el delantero nórdico abandonará el Manchester City para unirse al FC Barcelona durante la próxima ventana de transferencias. Según Gallardo, este supuesto acuerdo no es reciente, sino que se gestó antes de que Haaland se uniera al club inglés. Desafiante, retó a aquellos que dudan de su información a desmentirla.

El periodista detalló que Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, y Mino Raiola, fallecido representante de Haaland, acordaron la transferencia mucho antes de que el delantero noruego se uniera al Manchester City. Según Gallardo, la operación se llevará a cabo en el verano de 2024, y Laporta está actualmente en una gira por Medio Oriente para asegurar los recursos necesarios, estimados en alrededor de 100 millones de euros.

La viabilidad financiera de esta operación fue cuestionada por algunos colegas de Gallardo, dado el estado financiero aparentemente endeble del FC Barcelona. Sin embargo, el periodista insistió en que Laporta está negociando activamente para conseguir los fondos necesarios y destacó que la venta de jugadores, incluyendo a Robert Lewandowski y Raphinha, podría contribuir significativamente a financiar la llegada de Haaland.

Si esta información se materializa en los próximos meses, y considerando la posible llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid, Haaland se perfilaría como el gran rival del francés tanto en LaLiga como en la escena internacional, evocando la época dorada de Messi y Cristiano Ronaldo en los clubes ibéricos hace algunos años. Aunque por ahora, esta noticia debe ser tomada con cautela, ya que los vaivenes del mercado de fichajes pueden hacer que cualquier pronóstico sea incierto hasta que se cierre la ventana de transferencias.