Carlos Méndez Tejeda, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), expresó su desacuerdo por la implementación de la ley seca durante el este fin de semana, día en que se celebrarán dos importantes partidos de fútbol: los juegos de campeonato de la Champions y Concachampions.

El presidente de CANIRAC destacó que la prohibición no influirá significativamente en el resultado de la votación el domingo, sino que simplemente traslada el problema a otro ámbito.

Según Méndez Tejeda, esta medida no solo afecta a la industria restaurantera, sino que también tiene implicaciones en la salud pública y fomenta la venta de alcohol adulterado en establecimientos clandestinos.

"La ley seca es perjudicial para los restaurantes, especialmente en un día de gran afluencia como este sábado, cuando hay un partido de fútbol importante entre el Club Pachuca vs Columbus Crew, en el estadio Hidalgo, donde no solo se ve afectada la industria por la falta de venta de bebidas alcohólicas, sino que también se generan problemas de salud pública al incentivar la compra de alcohol en lugares clandestinos donde es adulterado," afirmó Méndez Tejeda.

Otro partido es, Real Madrid contra Borusia Dormunt, en Wembley, Inglaterra, a la hora de la comida en México, lo cual también despierta sumo interés entre la afición.

"La prohibición no disuade a las personas de querer adquirir bebidas alcohólicas; en cambio, las lleva a buscar alternativas menos seguras," señaló.

Para mitigar el impacto de la ley seca, muchos restaurantes han optado por ofrecer promociones especiales para atraer a los clientes a ver el partido en sus establecimientos. Sin embargo, la imposibilidad de vender bebidas alcohólicas sigue siendo una desventaja significativa para estos negocios.

"Estamos tratando de hacer lo mejor posible para mantener a los clientes interesados con promociones y un ambiente agradable para ver el partido, pero la ley seca nos pone en una posición difícil," añadió Méndez Tejeda.

CANIRAC ha solicitado a la administración reconsiderar la implementación de la ley seca en futuros eventos importantes, argumentando que una mejor regulación y control de ventas podría ser más efectivo y menos perjudicial para la economía local y la salud pública.