El huracán Beryl, el cual poco a poco se degradó a Tormenta Tropical, demostró ser menos severa de lo esperado durante su paso por Yucatán, causando vientos moderados y lluvias menores que las anticipadas. Las autoridades estatales han reportado algunos incidentes menores, pero sin pérdidas humanas que lamentar.

Luego de que Beryl se alejara de Yucatán y ya no representara ningún riesgo, se anunció el regreso a las actividades laborales y económicas no esenciales. El transporte público comienza a normalizarse y se ha levantado la ley seca impuesta durante la tormenta. Según los informes, solo se registraron algunos árboles y postes caídos, fallas en el suministro eléctrico, y otros incidentes menores como la caída de un espectacular en Progreso y algunas bardas en el puerto de Yucalpetén.

Respuesta de emergencia y restablecimiento del servicio eléctrico

Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Protección Civil y las Fuerzas Armadas respondieron a los reportes recibidos a través del número de emergencia 911, principalmente relacionados con árboles y letreros derrumbados por las ráfagas de viento.

En cuanto al restablecimiento del servicio de energía eléctrica, el gobierno estatal informó que este tema es competencia del gobierno federal a través de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Los ciudadanos deben levantar sus reportes a través del número 071.

El Grupo Aeroportuario de Sureste (ASUR) comunicó que a partir de las 18:00 horas de este viernes se restablecieron las operaciones normales del aeropuerto, el cual se mantuvo cerrado durante seis horas debido a la tormenta. De acuerdo con el reporte meteorológico, Beryl, degradado a tormenta tropical durante su paso por Yucatán, dejó el territorio estatal a las 17:30 horas de este viernes por Puerto Progreso para internarse en las aguas del Golfo de México. Su paso por el estado duró poco más de 10 horas.

Balance Final

Aunque Beryl trajo consigo desafíos, el impacto fue mucho menor de lo esperado. Las rápidas acciones de las autoridades y la colaboración de los servicios de emergencia ayudaron a mitigar los efectos de la tormenta, permitiendo un retorno rápido a la normalidad en Yucatán.