La tarde de este jueves, Culiacán, capital de Sinaloa, se vio inmersa en una ola de violencia debido a enfrentamientos entre hombres armados y elementos del Ejército en las comunidades de Paredones y Jesús María. Estos disturbios desataron una serie de incidentes que rápidamente se extendieron por la ciudad.

En redes sociales comenzaron a circular videos que mostraban vehículos incendiados y bloqueos en las carreteras, afectando tanto la entrada norte como sur de Culiacán. Además, se reportaron ponchallantas en varias vías, generando caos y temor entre los habitantes.

Particularmente, en la zona del Limón de los Ramos y la sindicatura de Jesús María, lugar donde en enero de 2023 fue capturado Ovidio Guzmán López, se intensificaron los bloqueos con vehículos en llamas y continuos enfrentamientos entre grupos armados, el Ejército y la Guardia Nacional. La situación en esta área se tornó especialmente peligrosa, afectando la salida norte de la ciudad, donde grupos de civiles armados impidieron el tránsito tras las balaceras en la zona rural.

Ante estos hechos, la Universidad Autónoma de Sinaloa tomó la decisión de suspender clases como medida preventiva, en respuesta a los narcobloqueos y la inseguridad que se apoderó de la ciudad. La población fue alertada a tomar precauciones y evitar las áreas afectadas por la violencia.